015 Casa de las Artes
Año: 2003
Localización: Cádiz
Tipo: diseño urbano
Tamaño: L
Presupuesto: 8.250.000€
Superficie: 11.000m2
“La Habana es Cádiz con mas negritos, Cádiz es la Habana con mas salero”. La canción como descripción, como arte, es decir como síntesis que trata de explicar un concepto y hacerlo explicito mediante la belleza. ¿Por qué no empezar a proyectar la casa de las artes desde el arte? ¿Por qué no desde una canción?.
La Casa de las Artes, y su proyecto como una reflexión contemporánea sobre que significa enseñar Arte en Cádiz hoy. La arquitectura no solo como objeto en el que se enseña y disfruta sino como objeto de enseñanza. Pensar una casa de las Artes exige un compromiso con el Arte y un reto en si mismo. Por eso hacer arquitectura en Cádiz debe ser un acto responsable en sí mismo.
Cádiz, La Habana,… en definitiva los VIAJES han marcado esta ciudad y su bagaje histórico y cultural. De esta manera queremos proponer un viaje a través del proyecto y su proceso, de su programa y de su construcción.
El PUERTO como lugar de intercambio de lenguas, culturas y dioses. Punto de encuentro entre lejanas civilizaciones, algunas desconocidas, donde por primera vez ver gentes de tez y vestimentas desconocidas, cargados con sus olores procedentes de especias, guisos y perfumes.
El Puerto como lugar de APRENDIZAJE, como taller, como escuela.
A lo largo de cinco siglos Cádiz ha sido eso: la conexión entre Europa y la otra mitad del mundo. El primer territorio que pisaban los ricos cargamentos del oro que una vez al año cruzaban el Atlántico en su camino a Sevilla. Desde allí hacia La Barra y remontar el Guadalquivir hasta la gran metrópoli del sur. Esta cualidad estratégica a otorgado a la ciudad una densidad de situaciones, colores, pensamientos que han ido modelando su carácter y forma. De esta manera lo “local” y lo “extranjero” se entremezclan para dotar de una clara identidad a Cádiz. Toda esa información se condensa en la ciudad y en su trama urbana. Así el MAR (y los viajes), junto con “lo local” han dibujado la intensa trama de Cádiz que hoy conocemos.
Por eso debemos entender que proyectar en Cádiz en proyectar desde el MAR.
El mar y el agua como soporte de los viajes, es decir, de la ciudad. Gracias a la posición de Cádiz frente al mar podemos decir que esta existe tal y como es. Esto es lo que le ha dado una historia, una tradición, pero fundamentalmente un poderío económico. Las trazas de la ciudad indiana continúan presentes.
Y de esta manera podemos entender que la propia Cádiz es como el mar. Su configuración urbana es respuesta de unas condiciones climatológicas y sociales particulares. La trama se comporta como estructura marina/acuosa que responde cerrándose a los fuertes temporales de componente Norte-Sur, y queriendo conducir la constante brisa Este-Oeste a lo largo de la ciudad. De esta manera aparece al entramado urbano interior, dando lugar a las pequeñas y estrechas calles que atrapan y conducen las brisas refrigerando el lugar o calentándolo gracias a la estabilidad térmica del mar. A su vez unas pequeñas plazas tratan de concentrar esos esfuerzos y aglutinar esta condición consiguiendo espacios públicos donde descansar, leer la prensa, tomar un cerveza o dejar pasar el tiempo a la sombra de unos árboles.
Nos parece que esas trazas son las buenas… posiblemente, desde la mirada del que también dibuja cerca del mar. Nos gustan las dimensiones de las callejas que buscan la sombra, y que conducen la brisa, los muros anchos que buscan la temperatura y la inercia térmica adecuada, el color y la textura de lo que puedes ir tocando y mirando (en una idea de escala de la distancia y los sentidos), el continuo goteo de espacios públicos y de reunión. Parece que la ciudad “moderna” pide amplias avenidas con arbolados discutibles y perspectivas dudosas, grandes bloques exentos, de dimensiones exactas y ventanas iguales, o a lo peor, grandes centros comerciales que ni miran, ni respiran… A nosotros nos interesa esa otra ciudad, densa pero permeable, que favorece la creación de vida y de espacios de expresión colectivos como patrón de creación. Así pues Si por lo que parece ya es imposible crear ciudad así (ya sea por condiciones funcionales, sociales o de la presión inmobiliaria, porqué no utilizarlo como esquema el proyecto?
Cádiz, el agua, los vientos,… el puerto como punto de partida/llegada del VIAJE.
Los viajes como fuente de conocimiento, de un conocimiento nuevo que llega.
Un viaje que también puede ser físico, pero que en nuestro caso es principalmente cultural e intelectual.
Queremos plantear un VIAJE a lo largo de la formación de los estudiantes. Se trata de un posicionamiento personal frente a un aprendizaje y a unas metas. El viaje como una trayectoria sinuosa, nunca lineal, en éste caso ligado al trasiego, al tránsito a través de la casa de las artes.
De esta manera nos gustaría pensar la Casa de las Artes como un mar de agua a través del cual los estudiantes establecen su VIAJE. Pero estamos convencidos de que este viaje no debe ser lineal… y que tanto se aprende en uno de los viajes como de los demás. Así al igual que Cádiz aprendió de la densidad de las diferencias de otros pueblos, ¿porqué no aprender unas artes de las otras?.
Por eso proponemos “3 viajes” diferentes a lo largo del edificio. Pero 3 viajes no lineales, que se entremezclan y tienen puntos de interconexión, que se retroalimentan y reconducen. No creemos en el pensamiento artístico único. Pensamos en la formación personal-cultural completa. Y es por eso por lo que confiamos en el contacto físico como punto de creación. De la curiosidad, del interés repentino, hasta el conocimiento profundo y extenso. El puerto, el viaje intelectual como mestizaje. Nos gustaría que la Casa de las Artes no tanto formara violinistas excepcionales, como personalidades culturales complejas o cuanto menos propias y globales.
Podemos explicar así la Casa de las Artes como un fragmento de “agua” de Cádiz, y de esta manera el programa se entendería como 3 viajes intercambiables a lo largo del océano.
3 viajes que arrancan desde la calle recorriendo el proyecto.
Así igualmente establecemos 3 paisajes/situaciones.
Abajo.
Una sombra fresca bajo “el agua”. Se describe una topografía activa que va acogiendo el programa más público del proyecto. Así aparece una plaza pública entendida como lugar de encuentro fresco y protegido. Donde la brisa se cuela para refrescar en las tardes de verano y templar los días más fríos de invierno. Es un espacio abierto que actúa como plaza y como espacio escénico intermedio, es decir, que está preparado/equipado para que puedan suceder diferentes cosas… sin un uso realmente claro.
De esta manera aparecen los programas de una forma líquida y continua en la fresca plaza.
El auditorio aprovecha la pendiente y se adapta con particiones móviles a distintas configuraciones. De la misma manera aparecen la cafetería, la sala de exposiciones, biblioteca, vestuario y pista deportiva grande como centro de actividades. Pero incluimos un aula por estudio como una necesidad de transmisión social de lo que allí pasa, una idea de abrir el la Casa de las Artes de Cádiz. Y esto es así porque creemos en una plaza viva o espacio artístico que se renegocia cada día, donde los estudiantes y ciudadanos escriben su historia llena de actividad. Un lugar donde poder sentarse a leer un libro, donde ensayar el examen de danza, escuchar la música, ver performances espontáneos, un concierto, partidos de fútbol, records guinnes, una exposición de arte o un cine de verano conformen una realidad. Este es un espacio público que se ofrece a la ciudad, la cual gana 6000 m2. Un espacio público equipado, en el cual se encuentran las piezas clave para establecer una primera relación con el ciudadano. Un lugar para despertar la curiosidad. Un lugar para mirar.
Y el agua siempre presente. Fuentes espontáneas se incorporan al mobiliario de la plaza, recordando el espacio en depresión a esos aljibes que durante cerca de 20 siglos abastecieron a la ciudad de los viajes.
En medio.
El agua como medio fluido.
3 viajes que lo recorren. Lugar donde planear y descubrir el viaje intelectual personal. Comenzando desde el juego en la niñez, con el encuentro casi casual con una práctica artística de tradición familiar o como respuesta a una destreza infantil, hasta alcanzar la madurez artística sólo en los casos excepcionales. En cualquier caso pensamos que el paso por este lugar debe fomentar el conocimiento y la formación total de los alumnos incluso en el caso de los posibles abandonos a media trayectoria.
La propuesta se desarrolla sobre una trama de mar, una trama de Cádiz. Una trama contemporánea, que esta vez si funciona ante las necesidades infraestructurales de nuestro tiempo, gracias a su posición elevada sobre la plaza-aljibe. Un pequeño barrio de la ciudad indiana que aparece extramuros, en terrenos ganados al mar y a donde deciden mudarse todos los artistas de la ciudad. Las 3 artes, los 3 viajes, pueblan indistintamente el edificio, estableciendo unas relaciones de yuxtaposición, miradas cruzadas, pero muy próximas.
3 viajes independientes.
A pesar de su aparente complejidad, todo el entramado de edificio, contiene de forma claramente diferenciada el programa necesario. Todo el conjunto se articula a partir de 4 núcleos de comunicación verticales que pinchan en el espacio continuo de la plaza. Cada una de ellos da acceso a todas las escuelas cuando el edificio esta en pleno rendimiento. Pero cada uno de ellos se vincula a una de las artes. Uno al conservatorio profesional de música, uno al conservatorio profesional de danza y dos a la escuela de artes plásticas y diseño (uno de ellos dotado de montacargas). Luego en el caso de establecerse horarios de cierre diferenciados, o debido a la época del año, cerrando el núcleo de comunicación vertical y las conexiones con los bloques de las otras artes, se puede cerrar una de las escuelas.
3 viajes intercambiables… espacios interfaz.
Sin embargo el propio edificio invita al descubrimiento y a la aventura. El alumno puede descubrir caminos no-reglados desde su clase de teoría hasta su aula de danza a través de otra de las escuelas, o pasar el tiempo libre conversando con la música del conservatorio de fondo. Pero esto sería como el principio… relaciones mas complejas, tal y como bailarines que montan coreografías para la última composición de un músico o artistas que dibujan, crean y construyen el decorado para la última creación de unos bailarines.
De este modo, las tres artes se van apropiando de cada una de las piezas que componen la Casa de las Artes en una estructura que va cambiando en cada planta conforme a las necesidades de espacio en cada momento. Nosotros planteamos en este documento la versión a fecha 09/2004. La versión completa de las bases técnicas, añadiendo los espacios de interfaz-relación entre las artes. De la misma forma en que cada disciplina puebla en nuestra propuesta diferentes bloques, esta situación puede cambiar a lo largo del tiempo. En ese caso se trata de una táctica de relaciones entre escuelas.
3 miradas próximas entre ellos (patios-calles).
El trabajo cruzado con otras escuelas/artes, aparece así como una de las asignaturas obvia y clave en el curso de cualquier alumno de esta casa. La visita a otra escuela se facilita tanto por la libre conexión entre los espacios, como por la existencia de espacios de relación-intercambio de conocimiento que van apareciendo a lo largo del complejo, como en las aulas que pueblan la plaza inferior, como en las piezas de doble altura que se asoman a pasillos que pertenecen a otras escuelas, como el los ensanchamientos junto a los lugares de recorrido que invitan a la estancia sobre una pequeña plaza.
Arriba.
La terraza como un paisaje que se abre a la topografía superior.
Un paisaje abierto capaz de establecer las relaciones necesarias entre las distintas partes del proyecto, donde poner un espacio en juego.
La cubierta se establece mediante dos grandes piezas que tratan de beneficiar de las visuales estratégicas que el solar ofrece. Se trata de buscar el olor y color del mar entre los numerosos obstáculos a que se enfrenta el solar. Pero 3 visuales lejanas abren el horizonte hacia el mar, siempre presente en el proyecto y en Cádiz, y que por lo tanto debe ser parte de la experiencia de la Casa de las Artes.
Así se conectan con el edificio y la vida diaria al sol y el cielo, desde la superficie del “edificio”. Ahora podremos mirar fuera del “agua”. Por el día el cielo azul y por la noche las estrellas como guía en el viaje académico y que sitúa a Cádiz en el mundo.
Lo local e internacional y Cádiz como punto de encuentro.
Hablar de construcción implica saber moverse entre estos dos conceptos.
Se propone el confiar en aquellos mecanismos tan comunes de la arquitectura, pero que revisados por la modernidad podemos reinterpretar.
El sistema bioclimático prevé el uso de un sistema de utilización de las energías naturales tal que permita el mínimo gasto energético. La trama de calles-patio del proyecto recoge los vientos predominantes (brisas) y los reconduce para acondicionar y reducir el impacto térmico en el edificio. En condiciones de calor (predominantes en un clima con el de Cádiz) los vientos refrigeran el conjunto. En Invierno estas brisas son mas cálidas que la temperatura con lo cual pasan a calentar el edificio.
Proponemos una arquitectura de “techos altos” y “muros gruesos”, como punto angular y bioclimático clave, pero reforzaremos estos aspectos con el uso de nuevas tecnologías. Así usaremos el nivel freático bajo para conseguir agua que mediante una bomba nos servirá para generar un sistema de refrigeración/calefacción del edificio. La estabilidad térmica del AGUA subterránea nos servirá para ello. Así pues cogeremos aire fresco de la calle para acondicionarlo tras pasarlo por el intercambiador de calor y distribuirlo por los distintos niveles.
Paralelamente a este sistema, encontramos en fachada otro sistema bioclimático que se suma al anterior por medio de un híbrido de “muro tromba”-“muros grueso” explotando su compatibilidad. Así los muros gruesos de hormigón en fachada (que funcionan de por si como paredes-viga estructurales) configuran el elemento másico con gran inercia térmica, mientras que la cámara exterior se configura con una malla de una tela térmica de protección solar (tipo “aluminet”: tejido abierto de hilos de aluminio y polipropileno) que aprovecha la tecnología aeroespacial en desarrollo para algo tan sencillo y tecnológico como los invernaderos agrarios. De apariencia plateada se podría tintar o imprimirse con motivo de exposiciones de artistas o como trabajos especiales de los alumnos graduados (e incorporando así los trabajos de los alumnos a la experiencia del edificio). Su textura es semitransparente protegiendo los espacios interiores del calor del verano (reduce las temperaturas en hasta 10 grados), y generando un microclima interior a muy bajo coste. Una estructura económica de cables conformara el entramado consiguiendo así una primera piel muy sencilla, económica y sobretodo interactiva.
De esta manera la fachada funcionará como una fachada ventilada que en el ciclo de verano se provocará por convección y gracias a las chimeneas solares. De esta manera conseguiremos una eficaz refrigeración de la edificación y disipación de la energía acumulada en la masa del edificio. Por la noche se aprovecha la radiación nocturna para compensar las perdidas energéticas. En el ciclo de invierno se invierte la situación consiguiendo captar energía y no perderla gracias al efecto invernadero y acumulando calor en la masa de los elementos edificatorios y acumuladores calor/frío para disiparla por la noche.
Estructura
El edificio funciona mediante piezas independientes que se apoyan puntualmente en el nivel de la plaza mediante pantallas. Los volúmenes puentean grandes luces a efectos convencionales, pero nada reseñables desde el punto de vista del concepto estructural que usa las paredes laterales de cada pieza como grandes vigas de canto de hormigón armado, aligeradas puntualmente por los huecos de las ventanas. De esta manera se logra una eficacia estructural elevada dando como consecuencia un espacio inferior suficientemente diáfano en el espacio plaza.
Las pantallas estructurales tratan de sumarse al proyecto y quieren hablar de diferentes conceptos al igual que ocurre en un paisaje marina. Así encontraremos distintas tipologías de pantallas tanto a nivel tipológico-estructural como programático. Pantallas estantería, pantallas taquilla, almacenamiento, iluminación, perforadas (tipo void), macizas, tubulares, … generarán un imaginario inferior dotando de cualidad y equipando el espacio intermedio de la plaza en sombra.
Presupuesto.
Tabla de superficies.
GENERAL… líneas-reflejo del agua organizan los paneles… en ellas puede estar escondidas el texto de la canción de Carlos Cano. www.tshirtsmy.com
Desde que estuve, niña en La Habana,
No se me puede olvidar,
Tanto Cádiz desde mi ventana tacita lejana,
Aquella mañana pude contemplar
Las olas de la caleta que es plata quieta,
Rompían contra las rocas de aquel paseo
Que al bamboleo de aquellas bocas
Allí le llaman el malecón
Había coches de caballos, que era por mayo
Sonaban por la alameda por puerta tierra
Y me traían ay tierra mía
Desde mi Cádiz el mismo son el son de los puertos
Dulzor de guayaba, calabaza, huertos
Aun pregunto quien me lo cantaba
QUE TENGO UN AMOR EN LA HABANA
Y EL OTRO EN ANDALUCIA
NO TE HE VISTO YO A TI TIERRA MIA
MÁS CERCA QUE LA MAÑANA
QUE APARECIO EN MI VENTANA DE LA HABANA COLONIAL,
TO CADIZ, LA CATEDRAL
LA VIÑA Y EL MENTIDERO Y VERAN QUE NO EXAGERO
SI AL CANTAR LA HABANERA REPITO
LA HABANA ES CADIZ CON MAS NEGRITOS
CADIZ ES LA HABANA CON MAS SALERO
Verán que tengo mi alma en la habana, no se me puede olvidar
Canto un tango y es una habanera, la misma manera
Tan dulce y galana y el mismo compás
Por la parte del caribe así se escribe
Cuando una canción de amores
Canción tan rica, se la dedican los trovadores
A una muchacha o a una ciudad
Y yo Cádiz te dedico y te lo explico
Porque te canto este tango que sabe a mango,
De esta manera esta habanera de piriñaca y de carnaval
Son de chirigota, sabor de melaza,
Guantánamo y rota
Que lo canta ya un coro en la plaza